Psic. Mercedes Viera Azpiroz
Psic. Rosario Valdés Strauch
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La ecografía obstétrica es un estudio de rutina que forma parte del control del embarazo normal.
Sirve para:
- confirmar el embarazo y su ubicación (dentro o fuera del útero)
- estimar el tiempo del embarazo
- ver la ubicación de la placenta y su aspecto
- determinar si es un embarazo múltiple
- controlar el desarrollo del bebé
- estimar su peso
- ver que está creciendo en forma apropiada
- ver la cantidad de líquido amniótico que hay alrededor del bebé
FUENTE: Unidad de Ecografía Ginecoobstétrica. Clínica Ginecotocoloógica B. Hospital de Clínicas. Universidad de la República. Uruguay.
La mayoría de los padres esperan con ansias la ecografía porque les permite ver por primera vez a su bebé y escuchar los latidos de su corazón. Es una experiencia emocionante el poder ver cómo se mueve mucho antes de poder sentir realmente sus movimientos.
Si bien el ecografista les dará una “foto” impresa para conservar como recuerdo está claro que el propósito de la ecografía no es darles la primera foto para comenzar el álbum del bebé, o para averiguar cuál es su sexo. Es importante saber que se realiza una ecografía para ver si su bebé está desarrollándose y creciendo con normalidad.
Algunas veces la ecografía resulta reaseguradora, por ejemplo cuando se escuchan los latidos o cuando muestra el desarrollo y crecimiento normales del bebé.
También puede ser disfrutable conocer el sexo del bebé antes que nazca.
Pero, en algunos casos, la ecografía detecta la dolorosa pérdida de un embarazo o la posibilidad de alguna malformación del bebé.
El doctor que te hace la ecografía tiene que concentrarse en mirar y medir muy bien al bebé. A veces no te explicará mientras está realizando la exploración porque necesita trabajar sin distraerse. Al finalizar el estudio te explicará lo que vio y cómo está todo, ahí podrás aprovechar para preguntarle tus dudas.
Con relación al sexo del bebé, si se ve claramente el doctor te lo va a decir, pero nunca antes del cuarto mes. Es importante que sepas que, como todos los diagnósticos, esto no será 100% seguro, sino que se confirmará más adelante.
Ten en cuenta que el ecografista no responderá preguntas acerca de si tienes que tomar alguna medicación, ni de cuándo terminará tu embarazo, ni si el mismo requiere de controles más seguidos. Todas esas cosas que pueden estar preocupándote, tienes que preguntarlas al doctor que te controla en la policlínica.
Al ecografista le ayuda mucho conocer cómo sientes los movimientos de tu bebé y si se mueve igual que siempre:
a) si se trata de tu primer embarazo quizás lo sientas mover luego de las 22 semanas (como a los 5 meses)
b) si no eres primeriza, puedes reconocer antes los movimientos, y sentirlos entre las 18 y las 20 semanas (un poco antes de los 5 meses), pero no hay que preocuparse si a esta altura no se sienten los movimientos todo el tiempo. A veces los movimientos son suaves y no los puedes notar todavía. Es diferente en el tercer trimestre, cuando el bebé se mueve todo el tiempo, excepto cuando duerme (ellos también necesitan descansar!)
- Si la ecografía se hace al principio del embarazo es necesario tener la vejiga llena para facilitar el estudio. Una hora antes debes beber 4 vasos de líquido sin gas y no volver a orinar hasta terminado el examen.
- En ocasiones al principio del embarazo se puede hacer la ecografía por vía transvaginal, en este caso la vejiga tiene que estar vacía. Se coloca el dispositivo de ultrasonido dentro de la vagina recubierto por un preservativo. El estudio no es doloroso ni se contraindica en caso de sangrado.
- En embarazos avanzados (2º-3º trimestre) no es necesario tener la vejiga llena.
Habitualmente se te harán al menos tres: una en cada trimestre. Si bien la ecografía es un estudio que no perjudica al bebé, y aún cuando sea muy tentador vivirla como un recuerdo o buscarla únicamente para saber el sexo del bebe, es preciso recordar que realizarse la ecografía no es lo mismo que sacar una “foto”. Se trata de un procedimiento médico y no se recomienda su realización sólo como diversión o curiosidad.
La primera se puede hacer entre las semanas 6 y 10. Si todo está bien, no todos los ginecólogos la pedirán. En esta ecografía interesará saber:
- la fecha de tu última menstruación
- si eres regular en tus períodos menstruales
- si has tomado anticonceptivos
Si no eres regular, si has tomado anticonceptivos y quedaste embarazada, o si no te acuerdas bien cuándo menstruaste, el ecografista te dirá de cuántas semanas estás embarazada. A partir de ese momento, para calcular la edad del bebé (en semanas) siempre se tendrá en cuenta el resultado de esa primer ecografía
La translucencia nucal se hace entre las 11 y 14 semanas de embarazo, para medirle el espesor la nuca , la presencia del hueso nasal y valorar la anatomía fetal (piernas, brazos, estómago y vejiga). Si está todo bien a esta altura, se aleja la posibilidad de que el bebe tenga problemas cromosómicos e importantes malformaciones. De todas formas es importante que esté claro que la ecografía no puede diagnosticar por sí sola estos problemas.
La segunda ecografía, se llama estructural o anatómica. Se realiza entre las 20 y 24 semanas, es también para verle y medirle todo el cuerpo y estudiar que esté bien formado. n- se miran con detenimiento distintas partes del interior de su cuerpo para ver si están normales: su cerebro, su corazón, la columna vertebral, el estómago, la vejiga y los riñonesn- se miden todos los huesos de sus brazos y piernas y se miran sus manos y pies.n- también se mira la ubicación de la placenta y la cantidad de líquido amniótico.
La tercer ecografía se hace entre las 28 y 34 semanas aproximadamente y se vuelve a mirar todo. Generalmente cuando la ecografía estructural está bien, la tercera seguirá bien. Sin embargo a veces puede aparecer algo que no se pudo detectar antes. n- Se mirará especialmente si la cabeza, la columna, los riñones y el estomago siguen bien. Se controlará que el bebe esté creciendo bien.
Medida del cuello del útero por ecografía transabdominal o ecografía transvaginal. Si el cuello estuviera corto habría más posibilidades de que el parto se produzca antes de tiempo. Es un dato que tiene que saber el doctor que controla tu embarazo.
Doppler feto placentario, no es un estudio que se haga a todas las embarazadas. Se hace cuando la embarazada tiene algún problema de salud, como por ejemplo: presión alta, diabetes, problemas de la sangre; o, cuando el bebe no está creciendo bien. El doppler permite estudiar cómo le pasa la sangre al bebe, a través de los vasos sanguíneos maternos, del cordón umbilical y de sus propios vasos. Este dato nos permite saber cómo está la salud del bebe y si hay necesidad de adelantarle el parto.
Si bien la ecografía es mucho más que una “visita social” al bebé, es un momento muy especial, cargado de emoción, que quizás quieras compartir con tus seres más queridos: tu pareja, un familiar, una amiga…
Según en qué institución te realices el estudio, te permitirán elegir una o dos personas que te acompañen en este momento.